El caso
El municipio capitalino recoge 450 toneladas diarias de residuos residenciales y urbanos. Consciente de que este es un problema de educación que tiene un impacto negativo sobre el ambiente, la belleza de la ciudad y la salud de sus habitantes, la institución lanzó el reto de crear un programa permanente que ayude a paliar el problema.
El desafío
Concebir y crear un programa educativo permanente con la participación ciudadana, de las instituciones de gobierno relacionadas con educación, salud y ambiente, así como con el sector privado, actor clave en la generación de residuos.
Resultado
Se diseñó un programa educativo innovador basado en nuevas tecnologías de información y redes sociales, creación e instalación del Consejo Cantonal de Sostenibilidad, alianzas e involucramiento del sector privado, convenios con universidades para la implementación de materiales educativos, mapa de actores en los distritos críticos y branding.